martes, 29 de diciembre de 2009

Y le damos la bienvenida al Tigre


Felíz año nuevo hermanos. Que la fuerza del tigre nos desawebe y nos inspire. Ojo: Tigre: éxito en los proyectos emprendidos.
Los amo.
K.

jueves, 17 de diciembre de 2009

La cosecha de Berlusconi



Y como un español veloz dijo por allí, esta sería la Ostia que el cura no le dió a Berlusconi.
Tiempos que corren.

viernes, 11 de diciembre de 2009

Manifestación - Performance por el Planeta

Queridos amigos:
Es muy desagradable y poco nice andar pensando en que el planeta está destruyéndose por nuestras malas decisiones, pero es así.
Este es el mundo que dejamos para nuestros hijos, para nuestros nietos.
Si puedo ROGARLES algo, es que nos unamos... nos han hecho creer que nuestra voz no cambiará nada... y la verdad es que los grandes cambios los hemos hecho nosotros, la gente, los habitantes de la tierra.
Si amas a tus hijos, si amas a tus nietos (los que vendrán) , o si sencillamente tienes ganas de seguirte bañando abundantemente, respirar aire fresco, ver pajaritos, ir a la playa sin wetsuit completo con protector solar... si sencillamente quieres seguir respirando oxígeno., estás vivo y quieres seguir estándolo... NO FALTES, porque tú eres importante y contamos contigo, y tu futuro cuenta contigo también.
Algunas personas piensan que los ambientalistas exageran... Yo he visto mi laguna secarse (2mts de altura de agua de manantial) en una semana. Morir todos los peces, aumentar el calor, migración de las aves, animales salvajes que ya no tienen acequias frescas ni agua que beber... En mi casa, en Huachipa. Creo que es una clara señal. Estamos realmente contra el reloj.

Pasen esto a toda la gente que puedan.
Si pueden lleven amigos fotógrafos, periodistas, videastas, etc. Queremos unirnos a las noticias internacionales.

SI ERES FAMOSO VEN, y usa tu fama para algo útil- que para eso sirve :) -
Abrazos,
K.

Sábado 12 - 13.00 hs- Frente al consulado de Dinamarca, Bernardo Monteagudo 201. San Isidro, Lima.

Para llegar al Consulado de Dinamarca:
A la altura de las cuadras 30 - 31 de salaverry se encuentra la calle Alberto del campo. Entran por allí y antes de llegar a Juan de Aliaga doblan a la izquierda. Queda al lado de los edificios de la Sunat y Osinerg.

PD:
No tengo la menor idea de dónde sean estas calles en San Isidro...pero estoy segura de que el sábado estaremos allí ;)

QUIENES SOMOS Y PORQUË
Considerando que la contaminación del planeta supone nuestra propia extinción y que está en nuestras manos, aquí y ahora, la posibilidad de cambiar el rumbo y alejarnos de una catástrofe climática, consideramos oportuno mantifestarnos a favor de la Cumbre Climática que se está realizando en Copenhage del 8 al 14 de diciembre. Somos civiles sin partido político. Ejercemos nuestros derechos civiles.

CUAL ES EL PLAN
Proponemos una manifestación pacífica y artística en el frente del consulado de Dinamarca. Por allí no pasa mucha gente, pero nuestro interés es conseguir un impacto mediático y, mejor aún, internacional.

QUE PINTA EL PERU
El Perú es un país pequeño en comparación a México o Brasil, pero es un país estratégico, con la MAYOR BIODIVERSIDAD DEL MUNDO. Nuestra voz es importante en este momento, para el cuidado y preservación de nuestra agua, de nuestros bosques, de nuestra fauna y finalmente, del mundo que nos rodea y del que dependemos para sobrevivir. Si nosotros no nos pronunciamos, las cosas van a seguir por donde van<

LAS PROPUESTAS
Ayer recién coordinamos esto. La idea es hacer performances de un alto impacto visual o sonoro. Ustedes pueden escoger una propuesta y seguirla, o también, naturalmente, llevar su propia propuesta. Lo importante es que no hayas desmanes y que intentemos expresarnos mediante el arte.

*Hay una propuesta de pintarse de verde la cara o el cuerpo. Ya se ha hecho alrededor del mundo.

*Nosotros proponemos pintarnos de Jaguares _ Otorongos. Ese es el animal representativo de nuestra selva. Demasiado título para los políticos corruptos. El mensaje a nivel internacional sería el que la selva del Perú está presente y esperando ser protegida, y a nivel nacional sería un pedido a los políticos de que protejan realmente nuestra naturaleza más allá de la corrupción. Allí habrá pintura para cuerpo. Recomendamos, aprendiendo de las organizaciones mundiales, mostrar la mayor cantidad de piel posible, -chicas usen su cuerpo para algo útil ;)- si les gana la timidez -completamente saboteadora en estos tiempos- vale la presencia y pues bueno, pueden pintarse sólo los brazos, o la cara.
Podríamos LLEVAR a nuestros NIÑOS, es su mundo el que estamos protegiendo. La manifestación es pacífica.
Lleven la parte de arrriba de su bikini. Habrá modelos, bailarines y actrices medio desnudas por el planeta.

*Otra propuesta es la de hacer carteles muy simples: Triángulo amarillo, borde en negro y dentro, una gota de agua. Como si fuera una señal de tránito.

*O Orla roja con la línea que atraviesa cruzando y adentro CO2.

*Propusieron una muy buena: pintarse la cara de planeta y ponerse una soga al cuello (Jaajajxxzx) Bastaría con la soga al cuello, también, ya que es lo que esamos haciendo al depredar la tierra.

*Bienvenidos todos los músicos con sus instrumentos. A más música y tambor mucho mejor.

Los interesados recuerden: SÖLO TENEMOS UN DIA PARA PASAR LA VOZ.
Pásenle la voz a la gente que ustedes crean más pilas y concientes. Hagámos este esfuerzo. De paso va a ser divertido.

Si tienen otras ideas, o quieren seguir sus propias propuestas, háganlo por favor. Que la marcha sea como nuestra naturaleza: RICA Y DIVERSA.

Y amigos, desaweben a sus amigos con roche, expandamos la conciencia, la vida es una, y curiosamente a nosotros nos toca la posibilidad de cambiar el rumbo del destino. Hagámoslo con alegría y arte.

Allí nos vemos.

* la cosa luego sigue aquí (este es de otro colectivo pero es la misma causa):
Sábado, 12 de dic.De 4 a 8PM
Lugar: Parque del faro, malecón de miraflores.
Salvemos el Planeta, Lima-Copenhage 09.
Vigilia artistica, unidos por el planeta.

lunes, 7 de diciembre de 2009

Samba


Samba casera.
Para ud.

Increíble Perú- La Marinera



Qué? Es necesario que sea 28? Es necesario que estemos lejos de casa? Es necesario que vuelva a ganar Kina?
Siempre es un buen momento para la lágrima patria.

Felíz Perú diario

domingo, 6 de diciembre de 2009

Las papeletas por exceso de velocidad son de 500 soles y no tienen 50% de descuento

Ya están instaladas las cámaras de vídeo que los filmarán si se pasan de lavelocidad autorizada.

Si quieres saber si tu auto tiene una papeleta entra aqui:http://www.pit.gob.pe/pit2007/EstadoCuenta.aspx

Para el Callao:
http://www.municallao.gob.pe/WebCallao/html/direc/consulta_transporte.html

Para saber si tienes orden de captura:http://www.pit.gob.pe/pit2007/captura.asp

Ubicación de las cámaras:

LIMA:.
Av. Del Ejercito Cuadra 7 Miraflores.
Av. Javier Prado Altura Av. Guardia Civil.
Av. Mateo Pumacahua Altura Parque Zonal.
Av. Túpac Amaru Altura Av. LosAlisos.
Av. Universitaria Cuadra 40 Los Olivos.
Av. Los Alisos - Los Olivos.
Av. Alameda del Corregidor Cuadra 4.
Av. R. Ferrero Cuadra 2 Alt. De la Universidad Agraria.
Carretera Central . Km. 29 Alt. Centro Recreacional el Bosque.
Carretera Central Km.25 - Chaclacayo.
Chorrillos Pantanos de Villa-Alturade Luchetti.
Costa Verde Grifo Repsol.
Circuito de Playas Marbella.
Puente Piedra Altura del Peaje.
Vía Expresa Javier Prado Altura Av. Aviación San Borja.
Vía Expresa Paseo de la República -Puente Gonzáles Prada

martes, 1 de diciembre de 2009

El Blog de Sara




Mi perfo unipersonal.

Dirige Guillermo Castrillón.

*

*

*

Es precisa la Revolución Personal.

El lado femenino de Dios

Gracias Cesar, por tu ensueño-



Tú eres el espectador.
Eres Don Juan.
Vas de obra en obra enamorándote y huyendo.
Amas, aplaudes, disfrutas en la oscuridad y al terminar, cuando las luces se encienden, escapas libre y sin culpa.
Te llevas el recuerdo de quienes amaste esta noche –podrías volver a encontrártelas- y piensas en tu siguiente obra, el siguiente escenario en el que disfrutarás tu próxima conquista.
Don Juan, te tengo una noticia.
Seis mujeres bonitas y talentosas te esperan en la avenida Camino Real. Son actrices reconocidas pero no tan reconocibles.
Son bellas, pero el director –y en especial su coreógrafa, otra mujer adorable llamada Mirella Carbone- se han encargado de disfrazar esa belleza, de esconderla debajo de otros rostros para que te cueste identificarla.
Verás a la vieja despiadada, a la niña perversa, a la guerrera griega, al ángel que canta, a la actriz chismosa, a la mujerhombre que es más macho que tú...
Las verás a todas para que no puedas ver a ninguna, porque la dirección de Jorge Guerra –en una muy buena labor- nos muestra a las mujeres (a sus mujeres) como seres divinos, adorables y diabólicos a la vez, que dan y quitan porque son la vida, la muerte, el amor y todo lo que nos lleva de la nariz por esta montaña rusa que es el tiempo.
Son Alejandra Guerra, Kareen Spano, Denise Arregui, Sarah Davida, Lita Baluarte y Lisette Gutiérrez.
Tienes que verla.
Tienes que verlas.
Sus encantos aparecen de golpe, la mitad llenos de lumbre, la mitad llenos de frío, pero vas a enamorarte de sus talentos, de su trabajo, de las mil cosas que hacen bien, de las imágenes que te regalan, de la energía que despliegan en el escenario alrededor de un hombre que creyó ser valioso por estar rodeado de mujeres, cuando en verdad son ellas las que deciden darte valor, a ti, a mí, a Guerra, a todos los espectadores.
Sergio Llusera y Franklin Dávalos son Don Juan, y también son excelentes.
No digo más porque me dejaron sin palabras.
Hay que ver este Don Juan regresa de la guerra en el teatro de la Católica antes del 14 de diciembre, en que se va.
Sobre todo tú tienes que verla.
Tú que sabes que eres un buen amante. Del buen teatro.

Por: César de María

Lima, hoy.






CARTA AL LECTOR

El Comercio se disculpa con sus lectores
Lamentamos profundamente que el comercial destinado a promover nuestra nueva colección Cocina Saludable haya sido elaborado y difundido con contenidos racistas que la dirección de El Comercio no autorizó y que los deplora en todos sus alcances.

La historia que se pretendió construir publicitariamente alrededor del concepto “comer sano” resultó a todas luces divorciada de nuestra línea editorial y del más elemental respeto por los derechos humanos, por lo que no nos hemos demorado en disponer su retiro de las pantallas televisivas.

El Comercio, desde su origen, ha librado grandes campañas a favor de la abolición de la esclavitud y de la igualdad de derechos entre todos los peruanos, por lo que nos duele en lo más hondo haber lastimado la susceptibilidad de un colectivo humano al que siempre hemos respetado y respaldado.

Frente a lo ocurrido, ofrecemos nuestras disculpas más sinceras a todos los que se hayan sentido afectados por el contenido del anuncio y nos comprometemos a tomar las medidas más drásticas del caso para que nunca más se repita una situación como la que motiva esta carta.
LA DIRECCIÓN DE EL COMERCIO

jueves, 26 de noviembre de 2009

so bored

me a-bu-rro-.
&%#°
=
*&
=
%
¡
¿
°
°
°
Pero los extraño.
Ultimas semanas de don juan regresa de la guerra en el centro cultural de la católica.
No vayan.
*

martes, 17 de noviembre de 2009

Y Pulmón se trepò a la combi

No seas pues caradura, Pulmón !!! Eres una pésima actriz!!!
Escribí la nota anterior sin haber visto los videos, con la noticia muy fresca, habiendo visto sólo tu cara en fotos. Cara de pava. Pero de pava no tienes nada. Ya ví los videos. Por mis veinte años de actriz que mientes con todos tus dientes y desde acà te digo que estoy más que de acuerdo con los Sres. Tombos que te han investigado:
Tú te autorobaste.
Te autorobaste.
Lo dices entre líneas en las entrevistas.
No te defiendes con sangre.
Y tu encontrada del pulmon en el estacionamiento es atroz!
Ni la más insulsa de las personas hubiera reaccionado como reaccionaste tú, ni un solo gesto de alivio, ni una mirada al cielo, ningún gesto de sorpresa o de ansiedad... NADA!!!

Te autorobaste kojuda.
Y ahora sales a decir que te han discriminado por tu apellido?
Que por eso te culpan?
Estoy molesta.
Nos embarras como peruanos primero.
Y ahora sigues embarrando a los peruanos descendientes de extranjeros?
No te parece que ya la kgaste bastante?

A mí parecer, señorita Pulmón - para toda su vida, Pulmón- Ud. no merecía un post que le diera el beneficio de la duda, necesita un psiquiatra, un viaje a la sierra, otro a la selva, LARGOS, un ayahuasca para que la agarre a patadas y la ubique, y ya nada más, porque con el problema legal que le está a punto de caer, con el desastre que debe ser su vida social, con la embarrada que le dió Ud misma a su espacio laboral y con lo complicada que se le puso la vida tal vez sea suficiente...

Le pido a Dios que nunca estéar en un lugar tan complicado. Ni ninguno de Uds, familias, amigos y demás, kojudopólitans. La verdad no se lo deseo a nadie.

Igual te dejo la duda, porque yo no te ví cuando sacaste el pulmón.

Pero, la verdad?
No te creo nada. Creo que eres egoísta, tramposa, desleal, sin bandera y pésima actriz.
*
*
*

Bah.

lunes, 26 de octubre de 2009

Presidente García, yo tampoco parezco peruana. MTHFK.

Así que esta mañana me despierto y mientras tomo mi cafecito huachipano, escuchando las aves vespertinas, me llega el Perú.21. Allí veo que por fín Susan Pulmón Hoefken dió la cara. No sé si han notado que la cara que tiene esta joven parece -a decir- poco avispada. Bueno sale Pulmón Hoefken a dar la cara después de cuatro días para decir que efectivamente alguien robó el pulmón de la exposición del cuerpo humano, que ella no lo escondió.
*
A lo que nuestro astuto, peruanísimo y populistón presidente salió con la pata en alto a decir (sic) "Esta mujer (Susan Hoefken) NO PARECE PERUANA, NACIO DE CASUALIDAD EN EL PERU, eso es lo malo de nacer de casualidad en el Perú. Cómo es posible el daño que nos ha hecho." Dice, este señor, y dice también que esta mujer debería renunciar a su nacionalidad peruana (???!).
*
No hablaré de la imágen catastrófica que tuvo el Perú después de su partida, al final de su primer mandato. Había peruanos hablando pestes del Perú por todas partes, y hablando pestes de su presidente no habido también. Esa fue la peor fama que nos pudieron hacer en mucho tiempo y le costó sangre y lagrimas a la mayoría de peruanos
*
Creo que la tipa en cuestión - Pulmón- es de mi colegio. Colegio peruano alemán v. Humboldt. Donde encontrarás a los gringos más cholos del Perú, a los más fanes, a los que se van a estudiar a Alemania y regresan porque no pueden vivir lejos de este mar, de este sol, de nuestra gente. De donde salen montones de profesionales muy bien parados, con muchísimo amor por el país y todos preparados para aportar lo mejor de ellos al mismo (y no solo en la industria cervecera). La gran mayoría son gringuísimos, bailan salsa muy bien y chupan pisco. Nos vamos a Cuzco o a la selva de viaje de prom, nunca a Miami. También hay estúpidas, frívolos y algunos maniáticos. Como en cualquier colegio.
*
Yo personalmente vengo de una larga lista de bricheras limeñas - a mi mamá no le gusta esta broma-. Lo digo porque mi bisabuela, limeña descendiente de franceses, se casó con un japonés. De allí, mi abuela, -limeña con kión- se casó con un alemán de Hamburgo. Y la hija de estos, mi mamá -limeña pateada- se casó con mi viejo, italiano cento per cento. Y de allí nací YO.

Y YO NO PAREZCO PERUANA.

De hecho, esto me perjudica infinitamente en mi trabajo de actriz. El día que me pinté el pelo de negro me dí cuenta de que todos los taxistas me habían estafado durante toda mi vida cobrándome un sol más, mínimo, cuando era rubia.
Me he pasado la vida viviendo la discriminación de mis propios compatriotas por gringa.
*
Ahora:
¿Un gringo peruano es menos peruano que un afro peruano?
¿Que un peruano criollo descendiente de españoles?
¿Que un nativo?
¿Qué somos los peruanos que no parecemos peruanos?
¿Peruanos de tercera clase?
¿De tercer derecho?
¿Pseudoperuanos?

Indignación, de escuchar estas palabras de un descendiente de españoles que habla como no hablaría un Asháninka- quien en esta escala de protoperuanidad sería peruanísimo-, porque ellos saben muy bien que todos somos parte de un todo.
*
Otro detalle: Pulmón tiene cara de pava. La temporada de la exposición fue un éxito, han hecho un mango de plata, algo eschuché de 600 visitas diarias. ¿A quién le conviene más el escándalo del pulmón robado? ¿A una limeña que sabe cómo es Lima y que sobre todo ya hizo todo el dinero que esperaba con su exposición o a los organizadores de la muestra internacional, que están mudando su exposición a Chile y que necesitan mucho más publicidad que Hoefken?
A mí me parece que la señorita no tiene carisma, se escondió como una avestruz y cree que la van a linchar. Pero mi sentido común me dice que después de sus declaraciones deberían ser los organizadores internacionales los investigados junto con Hoefken, antes de que nadie salga a decir Pavadas, en un país donde desgraciadamente vemos todo el tiempo cómo a la difamación le va - como deporte nacional- mucho mejor que al fútbol.
*
¿Osea que Parranditas García es más peruano que Sofía Mulanovich?
¿Más peruano que Chabuca- la gringa - Granda?
¿Más peruano que yo?
Lo dudo muchísimo, Dr. Sorbonne.
*
Huachipana indignada por comentario racistoide del presidente de la república pide que se amplíen las investigaciones sobre el Pulmón Criollo.
*
Alguien me escuchará?
*

domingo, 18 de octubre de 2009

Yo no he abortado - Por Rocío Silva Santisteban

Es absurdo creer que alguien puede estar a favor del aborto, pero despenalizarlo es una necesidad urgente

Por Rocío Silva Santisteban

Yo no he abortado y sin embargo soy una firme defensora de la despenalización del aborto. Por una razón básica: no se puede defender el derecho a la vida en abstracto cuando, por considerarlo un delito, miles de mujeres mueren anualmente por prácticas clandestinas de abortos en las peores condiciones. Yo soy cristiana y, por eso mismo, defiendo la vida misma y no la viabilidad de una célula. No se trata de un derecho al cuerpo, en mi opinión, sino de una defensa de la especie y de las mujeres como sujetos antes que como vientres.

Hace veinte años, y sin haberme casado, salí embarazada en Viena, Austria. Después de quedarnos pasmados mirando el color celeste del reactivo químico, Eduardo y yo nos dimos cuenta de que se confirmaban nuestras sospechas. La dueña de la casa que alquilábamos, Elfriede Svatek, me acompañó al Krankenhaus (no tenía ni una sola amiga que lo hiciera). En el hospital público un joven doctor de la India me preguntó en inglés por la última fecha de mi menstruación. Luego de examinarme me confirmó el embarazo y me preguntó si lo quería tener. “Natürlich” le contesté, un poco indignada por la pregunta, y por la obsecuencia de mi juventud.

El doctor me precisó que si quería abortar, necesitaba regresar de inmediato al día siguiente con mis documentos y mi ropa de cama; pero si lo quería tener, entonces, debía regresar en un mes para el segundo chequeo.

Me sorprendió la situación y la poca importancia que le había dado Frau Svatek: una dama setentona típica, abuelita, y sobre quien yo sospechaba cierto disimulado racismo. Ella me explicó que el servicio de salud austriaco era gratuito y que pensara dos veces si quería tener a la criatura. Muchos años después entendí que en Austria ad portas de la caída del muro de Berlín, durante el convulsionado 1989, los hospitales públicos atendían a todo tipo de mujeres, locales o inmigrantes, con papeles o sin papeles, porque la interrupción legal del embarazo era un derecho completamente aceptado. Frau Svatek también me enseñó dónde quedaba la Votivkirche porque ella asistía todos los domingos. Era católica, conservadora, pero reconocía plenamente una política pública que Europa había legalizado muchos años atrás.

¿Por qué no aborté? Yo esperaba a esa hija mucho antes de estar embarazada, con gran curiosidad y mucha irresponsabilidad de mi parte. Veinte años después me doy cuenta de que hubo razones concretas para aceptarla: tenía cierta esperanza económica en el futuro y había terminado mis dos carreras. No pasaba por una angustia mayor, excepto la de encontrarme bastante sola, y lejos de mi país.

¿Qué hubiera sucedido si mi embarazo hubiera sido el resultado de una violación en masa por siete sinchis como el de Giorgina Gamboa?, ¿o el producto de las torturas como el caso de Magdalena Montesa?, ¿o de la violación del propio padre como el de E.M.O., piurana, 16 años?, ¿o si el feto era anencefálico como el tortuoso embarazo de Karen Llantoy? La historia hubiera sido completamente diferente y, en todo caso, la opción por la defensa de la vida palpitante de la madre supera cualquier necesidad de convertirla en depósito de vida.

Es absurdo creer que alguien puede estar “a favor” del aborto. Pero, despenalizarlo es una necesidad urgente para evitar la criminalización de una decisión difícil, terrible, pero que conlleva una responsabilidad de un ser humano libre: nosotras las mujeres.

Lo incongruente es que sean hombres célibes quienes, en este acalorado debate, se adueñen de la verdad sobre la maternidad y sus límites.

*

miércoles, 14 de octubre de 2009

Don Juan


De jueves a Lunes, 8.00 pm
Centro Cultural de la Católica, Camino Real, San Isidro.

domingo, 11 de octubre de 2009

El Limeño Idiota

El Limeño Idiota es un tipito insoportable que habita en cada uno de nosotros. Como es un conchán, si no se lo impides se apodera de tus instalaciones internas. Si lo combates lo minimizas al sótano o a la azotea pero es inevitable, nunca se va, siempre está allí, sólo queda emborracharlo- le gusta- y dormirlo por allí.

Quién es el Limeño Idiota? Es ése que se va al concierto de Rubén Blades y no baila porque qué roche. Es esclavo del roche. Deberíamos poner roche con mayúsculas, Roche. El limeño idiota no sólo no baila en el concierto de Rubén Blades sino que, ofuscado, es capáz de pasarse todo el concierto combatiendo con los que se pusieron a bailar. Que se sienten, que no lo dejan ver. A ver al cine!

Un concierto es para sentir, para compartir con el artista, señor, señora, si le gusta la música de un artista, la mejor forma de demostrárselo es festejando y bailando, él de hecho los ve desde arriba del escenario! Si le gusta un artista, dígaselo, hágaselo sentir con esa pureza del que es auténtico. Hágaselo sentir a su manera, pero hágaselo sentir. Haga ese esfuerzo. Los homenajes post mortem son una cojudez que sólo palia la culpa de los que no supieron celebrar - y agradecer- en su momento.

Si va al teatro, aplauda, llore, ría, hágalo cuando le de la gana y le salga del forro, a los actores les gusta la emotividad. Un público realmente enocionado es lo que realmente paga. No la plata. Déjese ser, déjese caer, Goze. Experimente. Sumergase en sí, que es la única manera de no ahogarse a la larga.

Si le gusta un escritor dígaselo si lo ve, no se sienta idiota, que el idiota no es usted sino el limeño que tenemos dentro, despójese del idiota - y sólo del idiota, porque también hay el Limeño poeta, el Limeño risueño, el limeño campeón, el Limeño amigo, el Limeño soñador, el Gran Limeño nostálgico, el Limeño elegante, sólo por nombrar algunos-. Así que deshágase de éste, del idiota y con sentido del tiempo dígale a su escritor cuando lo vea, brevemente, me gusta mucho lo que escribe. Así tal vez Ud. tenga una experiencia interesante de vida, tal vez luego pueda afirmar que el escritor en cuestión es un imbécil, o tal vez lo invite a sentarse, beber y sea el padrino de su próximo hijo.

Si le gusta un poeta y se lo encuentra, invítelo a comer que son afables y tienen muy buen diente. Si es un futbolista, un político, un pintor, una figura de radio, no se sienta idiota, sonríale, no lo mire como un bicho raro, Ud. tiene derecho a tener la ilusión de un niño dentro.

Y si no le gusta, hable. Diga. Manifiéstese. Pero aprenda a hacerlo individualmente también, que el Limeño Idiota sólo habla desde el anonimato de las masas, de la internet o del chisme. Atrevase a ser Ud. Que vean su cara. Que conozcan su voz. Dése el tiempo de desarrollar su opinión personal.

Y no cedamos al miedo.

Porque sustancialmente el Limeño idiota, es profundamente cobarde.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Increíble Kojudopólitans: Salimos en Perú.21 !!!


Esto tan sólo confirma mis sospechas: En Perú.21 sí hay Kojudos Lúcidos :P
*
*
*
JJzxxzxz!!! Gracias!
Y sobre todo a Uds., compatriotas Kojudopólitans.
Muchos abrazos,
K.

domingo, 4 de octubre de 2009

Acerca de la conveniente administración de los ciclos del arte

Cuando tenga Ud - o esté en la búsqueda de - algún sentimiento intenso, sea de felicidad o frustración, haga musica. Cante. Únase a la primera expresión de la humanidad haciéndo sonar - dependiendo de sus dotes musicales- el tambor de su hermano menor o un clavicordio. Hága como la gente que parece feliz: cante en la ducha. Únase a la música y armonizaráse.

Cuando se sienta Ud. furioso, furibundo, enfermo de amor, rabia o miedo, pinte. Pinte. Hágalo de manera libre, irracional, sin censura. Pinte desde la columna. Incorpórese al color. Que sea una extención de su persona.
Pd: Es válido diluír el pigmento en lágrimas. Escupirle al lienzo. Acariciarlo. Arañarlo. Gritarle. Torturarlo hasta que confiese. Arrancarse los cabellos e incorporarlos en collage, etc.

Cuando el dolor ya lo haya dejado mudo, cuando el pesar sea tan grande que sea un esfuerzo imposible sonreír, cuando esté con ganas de asaltar una farmacia y llevarse todos los ansiolíticos y antidepresivos que osen cruzarse en su camino, cuando los serenos le impidan su paseo por el malecón por su expresión sombría, cuando toda luz se haya ido... o cuando se sienta inundado por ella, cuando no quepa en su pecho y sienta que es más grande que sí mismo, cuando por fín la felicidad total asome y le guiñe un ojo y usted sonría como si fuera un niño, un conejo, un ser de otra era... escriba poesía. Es mucho más estético que el dolor común y tiende a hacerlo trascender. Además tiene la virtud de capturar la esencia de la luz.

También puede danzar consigo mismo, que es hacer lo mismo pero sin palabras.

Finalmente, cuando se sienta Ud con algo qué decir, cuando tenga ganas de sentarse en el mundo para acariciarlo y enternecerlo, y así, darle la estocada, haga teatro.
Suele ser súmamente útil para personas con problemas de agresividad y extrema timidez. Cura males sociales. No recomendado en cuadros de severa encéfalocuadraditis. Suministrar en niños sin consultar al médico. No se conocen contraindicaciones, salvo casos de fulminante Invidia Vert en posibles personas circundantes con cuadros previos de Amargur Profundis. Si presenta reacciones adversas dentro de los tres primeros meses, no suspenda el tratamiento, ajuste, es lo normal.
*
*

*
Cualquier duda o comentario por favor hágalo en comentarios o escríbanos a http://váyaseporuntubo/megaindustriastransnacionalesdekulturaykonsumo/kojudopolis.com

lunes, 21 de septiembre de 2009

Don Juan Regresa de la Guerra


Llegó Don Juan. Viene de la Guerra. Desde este Jueves a las 8.00 pm en el Centro Cultural de la Católica. Actúan, Sara Davida, Alejandra Guerra, Denise Arregui, Lisette Gutierrez, Lita Baluarte, Fránklin Dávalos, Sergio Llusera y su servidora , Dra. K. Espasmo, segunda en la foto empezando por la derecha. Dirige Coco Guerra.

Excelentes pines, huachas y tal vez incluso el tornillo q te falta en...


viernes, 18 de septiembre de 2009

Semana de Estreno

Es verdad que te dan pesadillas. Que te tiemblan las piernas. Que te dá una suerte de pánico y que se te puede soltar el estómago, agarrotar el cuerpo, ir la voz, olvidar la letra. Semanas antes del estreno puedes tener transtornos de sueño, pánico, cuadros de angustia, etc.
También es muy probable que te sabotees. Supongo que después de mi hijita ya no me permito ser la Gran Autosaboteadora que siempre fuí. Después de todo, a ella lo único que debe tocarla es la calma y la alegría. Y necesito hacer dinero para llevarla a Disney. Así que vea Ud. como maneja su estreno.
Ahora es distinto. Me conozco mucho mejor. O tal vez sólo me doy menos espacio conciente para engañarme. Así que la semana de estreno es esto: Dormir, pasar letra, dormir, ajustar el personaje y las escenas, dormir, comer, dormir, amar, dormir, dormir, dormir y soñar con la obra. Encima, no permito que nada interno me afecte. ¿Quedan cosas por hacer? Lo vemos luego del estreno. ¿Autocríticas que generan ansiedad? Lo vemos después del estreno. ¿Paltas mayores en general? Están allí hace rato, así que las retomaremos cuando pase el estreno. El Estreno. La Marea.
Es una suerte de tiempo de tregua conmigo misma, que me genera un estado ultrarelajado. Habría quién piense que eso puede no ser positivo para ejercer un arte que necesita una buena dosis de dinamita. Pero yo sé que he sido muy insegura, ansiosa, y demás. Así que, la verdad, este estado ultrarelajado es un colchón intelecto-emocional, una suerte de concentración ociosa que me mantiene focalizada en el trabajo y me prepara para el momento inevitable: El enfrentamiento, el confrontamiento con el público.
Entonces sí: El momento inevitable. Te vestiste, te preparaste y allí, en la oscuridad del apagón entras a tu lugar en el escenario. Como un fantasma. Como un ladrón. Y luego, sucede: La luz. Se encienden las luces y allí estás tú, y tus compañeros y el gran Público. Público. Gente que paga por soñar, pero que justo por eso no se traga cualquier fantasía. Y entonces es como si nosotros estuvieramos en un barco y el público en tierra firme, y suceden los primeros segundos, y es inevitable, estamos allí flotando, invitando con todas nuestras artes a la gente a subirse con nosotros al galeón, a la canoa, al transatlántico y nos vayamos de aventura. Al ensueño. Al Mar de adentro.
Pero hay unos segundos, cuando escuchas el murmullo de la gente en sus butacas, cuando apagan la luz, cuando la encienden por primera vez... que te puede dar todo junto -pánico y pichi, parálisis e hiperventilación-, y entonces lo único que a mí me salva es saber que dormí, que me relajé todo lo que pude, que me sé mi letra en cada escena, que ensayé todo, cada caída, cada giro, cada cambio de vestuario, que estuve temprano y me fuí muy tarde y es eso, eso, lo que me da el derecho, el deber, de disfrutar. De gozar a lo grande el presente, en esta antigua fiesta que tan claro me recuerda que somos polvo, aliento, arrollo, chispa.
Luego lo mismo cada vez que te toca entrar a escena, hasta que te vas acostumbrando a la temporada. Los actores viejos, dicen que cuando dejas de sentir eso, es porque estás muerto.
*
*
*
Algo que es hermoso es ver las escenas de tus colegas entre las patas- esas telas negras o huecos de la escenografía desde donde se vé el escenario-, escuchar la música de las escenas, verlos hacer lo suyo iluminados por una luz que desde ya te remite al recuerdo...
*
Y después de todo esto, caminar, caminar 15, 20 cuadras. Sentir la noche, la libertad del viento después de la caja negra.
*
Lindo barco. Lindo, lindo viaje.

viernes, 4 de septiembre de 2009

Grunge

Su santo era el 6 de septiembre y bromeabamos bastante con esto por lo del seis y lo del nueve y el sesenta y nueve, y demás. Y era curioso que también fuera el día de mi santo. Lo conocí en la calle. De manera bastante oprobiosa. Le pedí un cigarrillo. Supongo que pesó el hecho de que se pareciera a Cobain. Mucho. Yo pasaba caminando por Diagonal. El estaba sentado en el Haiti, con un primo con nombre de terrorista. Pasé. Cuando menos me dí cuenta estaba allí sentada, fumando.
Le pregunté de dónde era. No me quedó claro. Le pregunté por sus viejos y se hizo el sordo. Hablamos un poco más y le di mi número.
Yo misma leo esto y mi lado pacato, limeño, sin cielo, me dice Rucón, eso eres. Un rucón. Supongo que si hubiera prestado más atención a esa voz no tendría nada que escribir. Nos vimos una segunda vez. De eso sólo recuerdo caminar por Miraflores, de noche. Explicándole que en Lima no llueve nunca y esas cosas, por que era extranjero. Era gringo. Gringo de verdad. De Seattle, decía él. Luego decía de Oregon. Pero sí era gringo. Gringuísimo pelo pita. Era de esos que caminan como pisando huevos y son muy altos y pálidos. Lindo el Gringo. Odiaba su país. O a esa altura estaba profundamente decepcionado lo que a veces ya es lo mismo. Esa noche de garúa me dijo que iría a Cajamarca a pasar el año nuevo. Y que sería very nice si yo iba a visitarlo someday. Ahora me doy cuenta de que tal vez lo decía sencillamente, sin intención, como quién invita a una taza de café. Yo acababa de terminar colegio. Por fín tenía Libreta Electoral. Llegué a Cajamarca el 28 de diciembre.
*
Vivimos vida de conejos. Nos bañábamos de vez en cuando y siempre en los Baños del Inca. Tomábamos vodka y fumábamos para olvidar todo eso que nos venía atormentando desde tan lejos, desde hace tanto. Conocí la levadura de cerveza en la ensalada y otras rarezas de gringo vegetariano y me volví veggie también. No tenía idea de a dónde iría mi vida. Pero aprendí bastante inglés. El después de seis meses hablaba muy poco castellano. Sin embargo nos reíamos bastante, flacos hasta las patas, creyendo ser felices por primera vez desde la infancia.
Pero a pesar de sus ojos de océano, de toda su cobainez, de sus maneras dulces, había algo en él, una sombra, un fantasma. Era eso tal vez lo que me hacía dolorosamente sospechar que no era él el amor de mi vida. O tal vez era el hecho de que no tocara muy bien la guitarra. En esa época, todo eso parecía estar íntimamente relacionado. Y lo estaba. Sin embargo había algo. Algo en nuestra elección de vida en ese momento. Un profundo desprecio. Un desprecio sincero y humilde. Por las normas, por lo que se suponía que debíamos ser. Por lo que el sistema esperaba de nosotros. La música era buena por fín después de tantos años de ñoñas y podíamos escuchar no sólo a Nirvana sino a Sonic Youth, Soundgarden, Pixies y tantos otros que por fín sonaban a algo posible, real, perdurable. Música que encriptaba nuestra voz. La voz de todo joven pensante. Nuestra voz desde la carpita para dos personas que el gringo loco había armado dentro de la micro habitación donde vivíamos, yo creo que no sólo por el frío que hacía sino abiertamente por joder. A la realidad. A la cordura. A lo que debía de ser.
Tarde o temprano me enfermé de los riñones y tuvimos que regresar de nuestro paraíso de la Miseria. En Cajamarca había empezado tocando la guitarra en un bar, y al poco tiempo me dí cuenta de que eso no me iba a alcanzar para volver. Así que por un jugo le leí las cartas a una chica en la juguería de la plaza y me hice de un nicho inesperado. A las dos semanas, luego de que todas las señoras de Cajamarca hartas de hastío antes de la tv con cable pasaran por mi consultorio astral en la juguería, justo a tiempo y con las primeras fiebres renales, compramos pasajes y nos regresamos a Lima.
Ese viaje de regreso es una de las cosas más surrealistas que yo recuerde. Viajamos con gallinas y sacos de verduras, lo que en el Perú de esos años era casi normal, pero a medio viaje volaba en fiebre. El dolor era imposible. Recuerdo que me eché en el suelo del interprovincial para dormir y un tío gordo me arrimó con su pie de tanque. Que me echara en mi sitio. Me alcanzaron las fuerzas para decirle Tengo mucha fiebre. Luego no recuerdo más.
Recuerdo que estábamos en Lima. Recuerdo que Taylor -porque así era su nombre, más apellido que otra cosa- tenía que regresarse a su tierra. La tierra del demonio. Estupidolandia. Hogar del Mal. Me dijo para irme con él. Qué haríamos allá, le pregunté. Me dijo que podríamos tener un bebé. Y podrías pedir dinero en la autopista. Siendo tan bonita como eres nuestro bebé va a ser hermoso. Y podremos vivir de eso? Sure. Me presté un dinero y me dispuse a partir.
Supongo que estaba furiosa con el mundo. Supongo que quería irme muy lejos, incluso al infierno. Pero las cosas comenzaron a salir mal esa misma tarde. No quisieron venderme un pasaje sólo de ida. Dijeron que incluso si nos casábamos no podíamos comprar un pasaje sólo de ida hasta que yo tuviera la residencia. Así que él tuvo que irse sólo. Y yo tuve que volver a la casa de mi madre. Sede del infierno, sección de violenta melancolía. Pasaron semanas. Luego meses. Yo empecé a sentir en el corazón el Pututu y me fuí a Cuzco a vivir un tiempo. Allí confirmé, con el dolor de mi alma en ese momento, llena de desconcierto, que o él no era el amor de mi vida o yo era una zorra que no sabía valorar nada. En todo caso, Cuzco me redefinió. Me volvió solitaria y silente. Vivir con los artesanos sudamericanos me arraigó mucho al feeling sudaka. Como dijo Charlie, tuve un amor y también mucho más. Cuando mi gringuito de dos metros finalmente regresó a Lima, había pasado casi un año.
Pero había sucedido más en ese año. Me había escrito puntualmente, todo el tiempo. Era lindo esperar el correo. Mi mamá, luego de tener una alegre cháchara telefónica larga distacia con él, cambió de opinión. Después de que él le dijera que si ella me hacía algo él se iba a vengar y que no se olvidara que él ya sabía dónde vivía y cosas del estilo, ella decidió que él ya no era un gringuito lindo sino un psicópata americano obsesivo, altamente peligroso y no me llegaron más cartas de él. Me comenzaron a llegar a la casa de mi hermana S. Su letra, though, empezó a cambiar. Se hizo más pequeña, nerviosa. Nunca me decía del todo qué era lo que estaba haciéndo allá. Sólo decía que me amaba. Que me amaba. Y que era su princess. Princess criollo-altiplánica aprendiendo a ser muda.
*
Un día, sin previo aviso, llegó. Uno de mis mejores amigos, el Gun, vino a mi casa y me dijo Oe, afuera está el Gringo, quiere verte. Un escalofrío de pánico me congeló la espalda y eso me llamó la atención. Siempre he creído ser intuitiva, y esa no es la manera como me pareció que debieras sentirte cuando llega el chico que te gusta. Es un congelarse parecido, pero diferente. De todas maneras bajé y me escabullí al parque para verlo.
Estaba más flaco aún. Pero ya no estaba rosado. Estaba amarillo, enfermo. Lo más resaltante era que ya no era él. Era otro. Otra cosa. Sus ojos estaban hundidos, fríos, llenos de miedo y rabia. Como antes, pero sin alegría. Sin humor. Sólo miedo. Rabia muda. Y confusión. Sentados entre los geranios del parque imaginaba las mejor manera de decirle al pobre que la voz hubiera sido que me pegara un telefonazo en vez de venirse de esa manera y sin previo aviso, a ver cómo le explico, no eres tú soy yo y todo eso después de que se ha hecho medio Pacífico para verme. Pensando en esto veo sus manos. La yema de sus dedos. Taylor, le digo. Me mira aterrado. Enséñama las manos. No, me dice, y las esconde como un niño, detrás de su espalda. Taylor, le digo. Muéstrame tus manos. Nunca ví dedos más opiáceos. Amarillos ocre hasta la mitad del dedo, menos los dedos meñiques. Me pregunto hasta ahora qué caraxo se estaría metiendo para que se le pintaran así los dedos y en tan poco tiempo. Porque le pregunté y no me dijo. Nada, me dijo. No estoy haciéndo nada.
No lo volví a ver. Le agarré miedo, no sé si por mi intuición o por los fantasmas de mi mamá. O por la sombra que ví bailando detrás de su alegría. De toda su dulzura de gringo huérfano. Su papá vendía autos. No, era corredor de casas. No, era apostador, en Vegas. Su mamá era una gringa que había perdido la fé en él y sus veinte años. Era rubia y vivía Somewhere con su nuevo hombre.
Nunca volví a ver a Taylor. Durante algunos meses me siguieron llegando sus cartas, cada vez más extrañas, incongruentes, escalofriantes. Cada vez con más violencia. Con más soledad. Poco a poco dejaron de llegar sus cartas. Un día llegó la última. Era una hoja de cuaderno cuadriculado. Había escrito tres palabras con letras grandes con lápices de color, y decía:

Happy Birthday Kareen.

La letra era frágil y grande y el mensaje daba miedo.
Me acordé entonces de Cobain. De los días en los que me parecía estar con él en Cajamarca. El buen Cobain y su Terrible Dulzura.
*
Esa
Gran,
Peligrosa
Pena.

viernes, 28 de agosto de 2009

viernes, 21 de agosto de 2009

Sabio

"Whatever you give a woman, she's going to multiply. If you give her sperm, she'll give you a baby. If you give her a house, she'll give you a home. If you give her groceries, she'll give you a meal. If you give her a smile, ...she'll give you her heart. She multiplies and enlarges what is given to her. So- if you give her any crap, you will receive a ton of shit" from Tribe.net

domingo, 9 de agosto de 2009

Del 13 festival de Cine de Lima o el capítulo 201 de Kojudópolis

Hay dos fiestas que le dan color a mi vida limeña. Dos fechas que espero con ilusión. La primera es La Fiesta Callejera del Carnaval de Barranco - con mayúsculas. La segunda es la semana del festival del Cine en Lima. Son dos fiestas totalmente diferentes. Una es del barrio, absolutamente anárkika, húmeda, colorida, fiesta de desbarrancados frente al mar. La otra es más bien selecta, ultra fina, hasta dicen elitista.
Bueno pues este año, llega la invitación al baile real en el castillo de la Católica con cierta tardanza. Al igual que muchos, su servidora exhala aliviada al ver las tarjetitas con piel de gallina en la portada anunciando que este año se trata de un cine que te toca. El parte llega tarde, pero eso no es de importancia para su servidora, quien hace semanas sabe qué se va a poner en la inauguración y en la clausura, cuáles son las sombras que con el atuendo combinan y ya mandó a hacer sus tarjetas de presentación, porque finalmente, entre pisco y pisco, esto de lo que se trata no es sólo de pasión por el cine, sino de trabajo.
Llega la invitación mejor tarde que nunca y ella, feliz, se entrega a la ensoñación de las fiestas, los abrazos, las luces y las burbujas. Soñando soñando llego a mi trabajo, donde estoy ensayando una obra bellísima que se llama Don Juan Vuelve de la Guerra, con un elenco de lujo. Y este elenco de lujo, disimulando su excitación actoral por el festival de cine, ya comenta acerca de quién tiene entradas para la Fiesta. La Madre que lo parió. La fiesta. Verdad que la invitación es a la perra inauguración, y no a la fiesta. Me siento en la leche hervida. Maldita sea. Pero si estoy trabajando en un montaje para la Católica a mostrar en Centro Cultural, so por qué mangos yo no estoy invitada al fu%$# k1n tono. Supra may. Voy parando las antenas y me entero que casi nadie tiene entradas para esta fiesta, que no ha habido presupuesto y blablabla. Osea que no soy sólo yo. La fiesta es sólo para los que salen en las películas del festival.
Depresión. Malaleche.
Lo pienso. Un par de días. Me provoca sinceramente no ir al festival. Tanto arreglarse para ni siquiera beber un pisco entre amigos. O tener que andar colándose como si una fuera una quinceañera. Tenía ganas de quedarme en mi casa, en medias, comiendo fideos y panqueques en mi cama, mirándo VH1 y maldiciendo el mundo. Pero desgraciadamente, no podía imaginarme el cuadro con una K. feliz. K. está triste comiendo su fideo en cama. A pesar del pelo actualmente corto me veo con bata de flores y ruleros.
Ni k-gando. Yo me visto. Yo me cambio, me baño y me peino. Y me perfumo. Y me maquillo. Y si nadie me da bola y no puedo entrar a la fiesta del Cine de mi ciudad, pues qué karaxo. Me iré elegantísima al Bolívar, a beberme un Pisco Sour en esa barra tan guapa. Y que se jodan. Esta es mi vida. Mi película. Y quiero que tenga arte. Poesía. Brío. Luz. Así que cenicienta dijo: Jódanse pelotudos. Si no me quieren se la pierden y se puso tacones. Y perfume. Y salió a la calle en su cafetera mágica.
Todo comenzó a ir bien. Me fuí del ensayo a la casa de mi amiga D. Ella, para bendiciones, me vió y me prestó un montón de detallitos que me hicierton la noche. Unas medias de coquitos, una correa fina. Un buen bra. Esta es una amiga de verdad, pienso yo. Y se lo agradezco a mi hada madrina. Al rato me llama otra colega, la guapa A. y me dice K!!! vamos juntas al festival. Como A. tiene contactos asumo que me está diciendo para ir a la fiesta y salto en una pata. Viene a recogerme al rato, y nos vamos al auditorio del Santa Ursula. Llegamos tarde. Pero eso no importa. Estamos allí. En el camino me entero de que NO HAY ENTRADAS para la fiesta así que a llorar al muro. Pero la buena A. me dice sinceramente que buscará cómo hacerme entrar. No te preocupes, le digo. Vestida, con tacos y un pisco me veo entrando por la cocina disfrazada de mesero al cóctel del Country Club, sólo por pura anarquía, sólo por joder, sólo porque no me gusta sentirme un fantasma, me colo.
No hay entradas pero en la puerta está X. quién me estima. Me encuentro a la salida de la inauguración con dos iracundos barranquinos, dos díscolos hijos de la noche, la risa y el desbarranque, grandes coreógrafos y bailarines. Q alegría, mis compañeros de locura. Así que con ellos, que estaban guapísimos y bañados para la ocasión, la noche se pintó de lujo. En el camino nos encontramos con una actriz con mucho estilo, mayor que nosotros. ¿A dónde vas? A la fiesta. ¿Qué? ¿Tienes entrada? No, responde. Pero quién no me va a dejar entrar a mí, dice M. B. con su sonrisa de aplausos, su cabello brillante y su abrigo con pieles ecológicas. ¡Bien M! Le gritamos, Así se habla, esa es la actitud y nos vamos riendo hacia el cocktel. Poco antes de llegar le digo a mi amigo José R. Este es el momento, Cholé. Ahora sabremos. Si entraremos y beberemos champagnes o si acabaremos inevitablemente en el Juanito, pisqueando, con gusto pero exiliados. ¡Ay! me dice, ¡cállate! Me haces sentir calambres en la barriga. Así es más rico, pienso. Vamos caminando por el hall del hotel, volteo y veo a Ceci B. que viene con nosotros, tan guapa, tan vital, tan mujer. José y su sonrisa del millón de dólares, ultrafashion. Y yo sólo tengo que levantar la cara. Levantar la cara. Veníamos riendo porque nos decíamos: Ya, ahora no pongas tu cara de ¿Puedo entrar por favorcito? No tengo entrada pero hoy me he bañao para venir...ya pe...déjame entrar...jajaja, venimos riendo. K-gaos del susto. Ya nos acercamos . Allí está efectivamente X. Me ve llegar y con un esfuerzo oceánico le sonrío con glamour y le pido con una pestaña, no te pases, déjame entrar. El sonríe con su bigote y mueve la punta de su pie izquierdo, dejándome pasar. Gracias le digo bajito, con una sonrisa para siempre y detrás mío veo que entran sin dificultad los iracundos barranquinos. Como un viento, directo a la barra.

Espectacular. Ya estamos dentro. ¿Todos bien? ¿Todos contentos? Vamos a beber. En la barra nos encontramos en una con un actor cubano de lujo, muy agradable. Bebemos. Miramos. Hay un montón de gente. Fotos, flashes laborales. Hubiera sido irónico que no me dejaran entrar. La única vez que trabajé en cine comercial fue en este hotel, en la peli Black Butterfly.

°°°°°°°
Cinco recuerdos importantes de esa noche:

°Un chileno, un camarógrafo espectacular que ha venido a invertir su vida en el Perú, el popular Chico de los Planos Bonitos, me dice: Escribe de esto en tu blog. No puede ser que por falta de presupuesto el festival no se luzca. Este es el festival de cine de Lima. Es un festival importante, ¿cachay?. Comprendo. Y tiene razón. Me quedo pensando en eso.

°Veo a la organizadora de las fiestas, una dama elegante, agotada, sentada en un sofá, odiándome a mí y a todos los colados.

°En un momento le doy un stiker de Kojudópolis a un director de cine y a una mujer. El me pregunta si tengo un blog y ella le responde Sí, es que ahora está de moda que las actrices escriban y tengan su blog. Señorita, éste es el post # 201 en Kojudópolis, el blog existe desde hace años. Y antes de éste, tuve otro, al que le tenía miedo. Infórmese primero. jjjj.

°Converso con un director a quien admiro mucho porque es una tipo bastante misterioso, talentoso e introvertido. Ultrafamoso, megacelebrado. Le pregunto qué va a hacer en teatro este año y me dice Nada, no me han dado sala. Juat? Le dije, La próxima vez que me nieguen sala a mí, no me voy a deprimir más.

°Había un director al que quería conocer en especial. El director de Camino, J. F. Esa noche todo fue muy rápido y no me atreví a hablarle mucho. Además estaba con sus dos hijas adolescentes y no quería ser molesta. Pero conseguí juntar valor para acercarme y darle un sticker de Kojudópolis. Esa noche todo fue muy rápido y no me atreví a hablarle mucho, pero conseguí juntar valor para acercarme,

y soñar.

Qué linda la semana del cine en Lima.
;)

sábado, 18 de julio de 2009

A los nacidos entre 1975 y 1989

Una amiga del colegio me envió esto. Algunas cosas me parecieron muy ciertas y me dió gusto leerlas. Otras son muy fresas - Jamás ví carrusel, o bueno, muy poquito- Y supongo q los cachorros de ahora tendrán sus vacilones...pero la verdad... nada como nuestra libertad de niño sòlo volando cometa, trepándose al techo, lanzando globos. Sólo se le escapó la llegada de Nirvana y el grunge, y el hecho de que somos los hijos del desencanto. Buenos poetas artistas y sin duda, distintos tipos de remodeladores sociales.

El objeto de esta misiva es la de reivindicar a una generación y media, la de todos aquellos que nacimos entre los años '75 y finales de los 80, la de los que estamos siendo actores de algo que nuestros progenitores ni podían soñar, la de los que tomarán las decisiones importantes en un futuro no muy lejano.
- Somos la última generación que hemos aprendido a jugar en la calle y en los recreos del colegio a las canicas (las blancas valian mas), al trompo, a la escondida, al mundo(el que tenia la cáscara de platano era el mejor), al elástico, y a los policias y ladrones (ya todos sabian a quien atrapar) a la vez, somos la primera que hemos jugado videojuegos como pimball (0.30 el rin), atari y super nintendo (0.30 el cuarto de hora), los primeros en ir a parques de diversiones o los primeros en ver dibujos animados en color.
- Fuimos los últimos en grabar canciones de la radio en casettes y los primeros en usar walkman y el chat. (MIRC)- Se nos ha etiquetado de generación X y tuvimos que tragarnos, Salvado por la Campana y Los años maravillosos (te gustaron en su momento, velas ahora...). Lloramos con Carrusel, y nos moríamos si no llegábamos a ver Nubeluz.
- Somos los ultimos en teclear en maquinas de escribir y los primeros en enviar el currículum por Internet.
- Siempre nos recuerdan acontecimientos de antes que naciéramos, como si no hubiéramos vivido nada histórico.
- Aprendimos a programar el video antes que nadie, jugamos el tetris, Mario Bross, top gear, vimos los anuncios de los primeros celulares y creímos que Internet sería un mundo libre.
- Somos la Generación de Nubeluz, Xuxa, G.i. Joe, los Thunder Cats, los Transformers, He-Man y las Tortugas Ninja, Looney Tonnes, Supercampeones, Los caballeros del zodiaco, de los pitufos, La Pantera Rosa , Los Picapiedras, el pájaro loco. Las niñas morian por ver Candy y sufrian por su Anthony.
- Los que crecieron escuchando a Queen, Soda, Madonna, Metalica, Kiss, Michael Jackson y Guns ´N Roses. También estaban las Azúcar Moreno, Magneto y los New Kids on the block.
- Nos emocionamos con Superman, ET, Mi amigo Mac, La Historia sin fin o En busca del Arca perdida.- Nunca hablabamos malas palabras delante de personas mayores...¡¡¡te sacaban el ancho!!!
- Comíamos jugo en polvo y la leche ENCI era buenaza!!! hasta que aprendimos a mezclarla con Nesquik que era más rico aún.
- No teníamos psicologos para problemas de concentración y/o aprendizaje... sino aprendías.. te caía nomás!!!
La verdad es que no sé cómo hemos podido sobrevivir a nuestra infancia!!!!Mirando atrás es difícil creer que estemos vivos:
- viajábamos en autos sin cinturones de seguridad traseros, sin sillitas especiales y sin air-bag, hacíamos viajes de 10-12h y no sufríamos el síndrome de la clase turista.
- No tuvimos puertas con protecciones, armarios o frascos de medicinas con tapa a prueba de niños.
- Andábamos en bicicleta sin casco, ni protectores para rodillas y codos. Los columpios eran de metal y con esquinas en punta. Salíamos de casa por la mañana, jugábamos todo el día, y solo volvíamos cuando se encendían las luces.
- No había Moviles. Íbamos a clase cargados de libros y cuadernos, todo metido en una mochila o bolsón que rara vez tenía refuerzo para los hombros y, mucho menos, ruedas!!! Comíamos dulces y tomábamos bebidas, pero no éramos obesos. Si acaso alguno era gordo y punto.
- Compartimos botellas de bebidas y nadie se contagio de nada, excepto de los piojos del cole, cosa que se solucionaba lavándose la cabeza con 'quitoso' o nopucid o en el peor de los casos kerosene.
- No tuvimos PlayStation 4, ni 1000 canales de televisión, ni pantallas planas, sonido sunround, mp3s, ipods, computadores e Internet, pero nos lo pasábamos de lo lindo tirándonos globos de agua o papelitos con liga. Bebíamos agua directamente del caño, agua sin embotellar, Y nunca escuchamos sobre el calentamiento global.
- Cortejabamos jugando a la botella borracha o al verdad o castigo, no en un chat diciendo :) xD =* ,"alguien sabe que mierda significa"? ni pretendíamos llamar la atención mediante un fotolog ni auto denominándonos pokemones ,EMOS, etc.
- Éramos responsables de nuestras acciones y acarreábamos con las consecuencias, no había nadie para resolver eso. Tuvimos libertad, fracaso, éxito y responsabilidad, y aprendimos a crecer con todo ello. Tú eres uno de ellos?? ¡Felicidades! ya tas bien viejo..Pero que rico añejar así!!! porque estas vivencias no se olvidan así nomás... En fin...vivimos una de las mejores epocas... y q nos envidien por eso... jejeje
nadie tendra una niñez como la nuestra ni una juventud como la que ahora tenemos!
Mandalo esto si quieres que tus amigos sepan q tan mas viejos q la ... jajajaja

miércoles, 15 de julio de 2009

Estación Soledad

Estoy parada frente a la sección tintes de cabello en el Plaza Vea de San Isidro. Casi voy al Wong, Deben tener más colores, pienso, Wong siempre ha sido más surtido, pero hoy no, no hoy. Por alguna razón que va en contradicción directa con los intereses de mi cabello parqueo en el Plaza Vea. Debe ser porque tiene luces más tenues.
Estoy parada frente a la sección tintes de cabello del Plaza Vea de San Isidro. Montones de mujeres guapas, de edades incalculables me saludan desde sus ventanitas de cartón. Así apiladas una sobre otra parecen seducirme desde algún edificio de departamentos sobrepoblado, o desde las vitrinas de algún barrio rosa entre Europa y Disneylandia. Tengo en la mano un chisguete de restauración total- efecto inmediato de Dove. Un resucitador de pelo. De fondo pasan esta canción de Mecano que habla de las palomas al viento, mujer contra mujer. Algo me dolió en el alma desde que entré al establecimiento y no sabía que era. Era esto. Esta canción. Qué me recuerda, pienso. No recuerdo. Llega entonces. Un antiguo amor. Pero no era a él a quién me recuerda. Me recuerda a su hermana mayor. Le habían roto el corazón, su novia no había aceptado la presión social de la Lima de hace 20 años y la abandonó. Eran lesbianas. El recuerdo me atravezó el alma. De pronto estaba ahí parada como quien espera el metro, en esta suerte de andén del cabello, apretando mi chisguete de salvación, a punto de morir , atravezada, muerta de pena. Con tantas ganas, tantas, de llorar allí mismo, no de salir corriendo, sencillamente de dejar correr este mar, este océano que estoy conteniendo, dejarlo libre, salir por olas, dejarlo libre como las palomas esas de las que habla la canción que me las imagino quién sabe porqué gaviotas, volando tan lindo, al raz del suelo, a la orilla del mar.
Atravezada por esta lanza que a la vez que me mata me sostiene y me inmoviliza, me doy cuenta de que sería conveniente comenzar a circular y a actuar normal porque he detectado a una señorita vestida de civil parada a unos prudentes dos metros mío que me observa insistentemente. El tiempo que tiene allí parada, la miradita, el mal gusto de la tenida, la elección inverosímil de los artículos escogidos que de forma incómoda carga entre sus manos, me revelan en un parpadeo que seguridad ya vino a verme. Siempre me pasa. Y más absorta me siento, peor es. Supongo que los deprimidos serán los que más roban. A mí siempre me vienen a marcar. No se por qué. Me gusta pensar que vienen porque me reconocen de alguna novela de hace ocho años. Ja.
Estoy parada frente a la sección tintes de cabello en el Plaza Vea de San Isidro, completamente compungida, emocionada, acontecida, tocada, inmóvil, con ojos de catarata del Niágara en pause. Mi cuerpo entero, aunque erguido, está todo afectado, consternado, descompuesto, profundamente herido por un daño imperceptible. No me puedo mover. En lenguaje de bailarinas diríamos que estoy en torción emocional. ¿Cuándo se acaba esta canción? Parada frente a la sección de tintes me siento de pronto en una estación de metro subterránea, metálica. Estoy parada en el andén. Un viento fuerte viene de donde llegará el metro. Pasará el tren. Sé que pasará el tren. Podré subir. O podré esperar. Qué hago aquí. Estoy parada otra vez aquí. Recuerdo este lugar. Estación Soledad. Recuerdo este lugar. Pero lejos, como en sueños. Otra vez acá. Veo tu tren partir. Me veo desde adentro de él, desdoblada. Aún espero en la estación. No puedo tomar tu tren pero quisiera. Pero no puedo. Pero quisiera. Me quedo allí mirandote con mi cara de no te olvides de mí y por favor vuelve a recogerme. Y sabemos que puedes no volver. Y que un día puedo yo ya no estar. Pero por ahora, por ahora no. Estaré. Estoy. He juntado todas las cajitas de los tintes de cabello de todos los cambios de color que me he hecho desde que no estamos. Las he juntado, las he pegado con mucho cariño e ingenio y me hecho- mira- este suelo, esta estera. No puedo, lo siento, por ahora irme a casa. Necesito quedarme aquí un rato. Necesito quedarme aquí a esperar. A dormir. A esperar. A esperar que vuelvas. A verte bajar del metro, confundido entre la gente, contento. Con tus flores. Con tus flores. Tú que siempre me traes flores. Con tus flores. Tengo que esperar aquí no tengo frío no tengo hambre no tengo no tengo pasan los días no importa llegarás estarás aparecerás materializado corpóreo no serás un sueño y yo estaré fea y sucia y canosa y con los dientes amarillentos y más flaca pero contenta contenta tan contenta. Sólo espero que me reconozcas. No le vayas a dar las flores a otra.
Sé donde estoy. Estoy en el Plaza Vea de San Isidro parada frente a la sección tintes de cabello. No estoy alucinada. Se donde estoy. Sé que la señorita no se ha movido de sus muy astutos dos metros de prudente distancia. Sé que me está mirando. Es sólo que prefiero quedarme aquí. Quedarme un rato aquí. Aprieto mi chisguete restaurador de cabello que es en realidad un transportador emocional secreto. Basta una apachurradita y ya estoy de nuevo en la estación de metro. Pero ya no estoy parada en el andén. Estoy caminando por los túneles, buscando la salida. El viento en la cara. En el pelo. Entre los dedos. Entre. Sé que afuera brilla el sol es verano. Es París. No sé si estás o no estás caminando a mi lado. Alguien camina a mi lado. Prefiero en mi ensueño no saber. Sé que estoy parada en el Plaza Vea de San Isidro, nunca vengo aquí, parada frente a los tintes de cabello, frente a las damas de la ilusión que me saludan mentirosas. Y tú no estás. Así que prefiero no estar. Prefiero no saber. Prefiero cerrar los ojos y no evitar sentir.

El viento.

viernes, 10 de julio de 2009

El baile

Cuando era chica odiaba el jueguito ese de las sillas. Sencillamente porque solía quedarme sin silla. Ya fuera por lenteja, o porque me daba mucha pena hacer volar a alguien de un potazo. Osea, por lenteja siempre. O tal vez porque los cumpleaños siempre me han puesto nerviosa y encontraba alguna razón para desbarrancarme y querer irme a casa.
Luego vinieron las fiestas adolescentes. Con la cara llena de granos. El pecho. La espalda. Kilos de más. Yo me veía así. Llegaba la música y todas esperábamos A que te saquen. Las chiquillas esperando, los nervios cuando los chicos se acercaban, la decepción al ver que le piden el baile a la de al lado. La rabia de ver la crueldad de algunos chicos que iban mirando fijamente a una chica y luego pedían a la de al lado. A propósito. Juegos crueles de niños que aprenden a ser hombres. A mí, curiosamente y en contra de la imágen de mí misma que yo guardaba conmigo, por lo general me sacaban a bailar. Pero siempre tenía el miedo. Y las veces que no me sacaron me quedó muy claro el recuerdo. La sensación.
También tenía miedo de hacer una fiesta por mi santo, llena de globos y torta y que nadie viniera. Eran las máximas angustias.
*
Ahora que estoy grande he podido comprobar que cuando hago una fiesta por lo general es un puto éxito y vaya Ud a saber porqué la gente puede relacionarla a una con un tonazo, pero esa es una realidad. Otra realidad es que hace años que no hago ninguna fiesta, que ya no me interesan las fiestas y que vivo en Huacondo. Otra realidad es que hace tiempo es otra la fiesta que me interesa. La fiesta del trabajo. La fiesta de las oportunidades que puedan darme independencia económica. La feria de los viajes, del mundo, de las alegrías de mis treintas, de encuentros con personas excepcionales, del reconocimiento de tu trabajo. Porque el reconocimiento trae las fichas doradas de la libertad.
Y yo, no sé ni siquiera cuál figura soy en este baile. No entiendo qué falla. No sé por qué si me siento una princesa traigo este traje de mozo, no entiendo por qué nadie me invita a comer, nadie me saca a bailar. Estoy parada en la sombra de la mejor fiesta a la que haya ido, y mis zapatos negros de hombre que trabaja están rotos y se asoma mi media a rayas, extravagante, estrafalaria, y la media está rota también , se me ve el dedo gordo, se me ve la uña y la uña está negra, la uña está larga, inevitablemente negra y larga, ni siquiera veo el rostro de la gente de la fiesta, no tienen rostro, por más que me esfuerzo no puedo definir, recordar sus rostros. Ahora entiendo. Es que yo no tengo rostro para ellos. Y ellos no tienen rostro para mí.
Yo sólo quiero comer. Yo sólo quiero bailar. No quiero ser amiga de los amigos, no quiero ser la novia del viejo verde director del centro cultural, no quiero ser la hipócrita karmosa, no quiero ser la estúpida diva que no tiene amigos y que se muere de sí misma, sólo quiero ser yo.
Tal vez es que yo me siento una joya y podría en verdad ser sólo una suerte de bola de excremento. Como las bolas de excremento que empujan los escarabajos gigantes del trópico. Pero para estos coleópteros gigantes esa bola de excremento es mucho más valiosa que cualquier joya, porque es su casa y comida, su complento perfecto. Y porque por más sal que le eches a un brillante no te lo puedes papear. Es lo único que tiene valor para ellos. Su bolita de pufi cósmica.

Cuándo conoceré a mi escarabajo laboral?
A mi Tarantino Sudaka
A mi Fellini de Huacondo
A mi Godard Andino-Tropical
A mi manager ciego
A mi productora rebelde?

*
Yo sólo quiero comer de eso.
Yo sólo quiero bailar.
*

jueves, 11 de junio de 2009

Juguemos a la ronda mientras el Lobo està

Recién en el simpático cafecito al que me llevó mi querida amiga Paloma, me entra la vergüenza. Había habido tanta gente. Y yo sin que nadie me pague o me lo pida, hablándole a todos. Es el espíritu teatrero, me disculpo conmigo misma. Nosotros estamos acostumbrados a accionar, a hablar en público, a no temerle a la gente. Sin embargo, eso funciona mucho mejor a través de un personaje. Nos reunimos en el óvalo de Watchaflower como quedamos. De pronto ya era hora, pero no habíamos planeado nada. Para pasarnos la voz sólo vía facebook y blogs, no estuvo mal la concurrencia. Eso es lo que me gusta de las marchas de Miraflores. Son bien anárquicas. No hay líderes. Hay artistas y gente harta y muy decente. De toda clase y origen. Es tan pacífico y buena onda que creo que no lo hacemos en Barranco para que no nos agarren de hippies pastrulos.
Ya éramos tantos y no había música. Sólo dos saxos – buenísimos- que iban improvisando con la célebre Ya se ha muerto mi abuelo. Entonces se me ocurre, Aquí es necesaria una performance. Sencilla y simbólica. Hagamos una cadena. Tomémonos las manos y hagamos una cadena alrededor del parque. Tal vez llegamos a darle la vuelta. Y entonces K. comienza a correr. A buscar a los teatreros, jóvenes y viejos. A buscar a los músicos. A hablar con la gente. Como una loca. La gente está de acuerdo con la idea. Nadie quiere desmanes, y no nos queremos ir a nuestra casa. Entonces conseguimos comenzar a formar la cadena. Ya se me acercan mujeres a decirme, Tú que eres una de las organizadoras, por qué no… Yo no soy nada, pienso, yo no soy ninguna organizadora y necesito ayuda, por favor hazlo tú. Yo ahora no soy yo, ni esto que tú ves, soy herramienta y riesgo, y necesito que tú también dirijas, y que tú también te atrevas a ser un loco hablándole a la gente, y que me acompañes porque me da vergüenza hablar sola.
No te digo nada, sólo Buena idea y Ayúdame a hacerlo. No sé si lo hiciste.

Antes de que se viniera la idea de la cadena me encuentro con unas amigas de la danza, y les digo en serio y en broma, que hay que calatearnos todos para manifestarnos como Dios manda porque de tan decentes aquí no hay un sólo pito y hay que ser muy sapo para ver que esto es una marcha y no un montón de gente reunida en esta plaza, como cualquier jueves a las siete en Watchaflower. Y entonces una de ellas, muy guapa, muy moderna, me dice algo así como Anda caletéate tú que yo soy muy pudorosa. Entonces yo le digo que Yo también soy muy pudorosa. Y ella me dice algo asì como Qué vas a ser pudorosa tú, por favor.

No pude evitarlo. Hubiera querido no fastidiarme. Pero me llegó tanto al seno. Como le tengo estima le digo No seas pues simple, X. Yo también soy muy pudorosa. He ahí el reto. En vencer el temor.
O sea, tú que tienes inteligencia no seas tan plácida como para considerarme una disoluta exhibicionista. Porque podría considerarte una comodona cobarde.

Gracias a Dios recuerdo a tiempo que pronto me va a venir a visitar Andrés, y que estoy en mis días Beethoven,- ver xxx- así que me relajo y me voy por allí. Si quiero paz tengo que dominar mis demonios. A correr. A armar algo. A perderme. A encontrarme en mis amigos.

Ya en el agradable cafecito al que me llevó mi querida amiga Paloma, me entra el ataque profundo de vergüenza. Qué pesado, decía ella, el señor ese que nos arreaba para que hiciéramos huevadas en la marcha. Yo estaba haciendo lo mismo, le digo. Ella traga discreta su chilcano y como es mi gran amiga, me dice, No K. El sí estaba muy pesado. Sin embargo su comentario me hace recordar la mirada de una señora a la que le pedí un par de veces que no deshiciera la fila, para que se viera una imagen clara y no pareciéramos un montón de turistas en Miraflores. La señora se hartó un poco de mí. Me miró con cara de Ya te oí flaquita. Y de pronto, sentada en este lindo café en Alcanfores, caí en cuenta de que le había hablado a cientos de personas, de que había sudado, de que les había dado indicaciones para una perfo que al final no se hizo como la planeamos en un inicio. Que varias personas me habían identificado como una organizadora.

Y me vino, naturalmente, la muda.

Últimamente, no hablo mucho. Y presiento que esto va a intensificarse con la edad. Hablar me da cada vez más fiaca y desde que escribo aquí me he vuelto todavía más muda. Debe ser el ejercicio de la observación. Prefiero eso a la sospecha del desencanto.
Veo el mundo que vivo hoy. Lo comparo con el mundo en el que crecí. Veo mi laguna muerta donde antes hubo tanta vida, peces, risas. Hoy luchamos por un mundo que se extingue y yo sigo andando en mi cafetera a gasolina. Y el problema no es la ley en sí, es la falta de respeto del establishment a todo lo que no forma parte de su club, es la necesidad de educación y alternativas para que no haya tala indiscriminada, minería destructiva. Y me pregunto en qué tipo de sanatorio mental vivo. Y qué clase de loco soy yo.

La idea era no darle la vuelta al parque. Sino hacer una cadena quieta. Poder escuchar el grito de alegría que llegaría desde el otro lado del parque al saber que logramos unirnos. La idea era de nido, pueril. También Gandhi parecía un niño adoptando la pasividad total ante el fuego británico. Tal vez la cosa sea así, ante la guerra de los grandes, gestos de niños.

De todas maneras, yo creo que falta más, falta mucho más para lograr algo. No con marchas que me parece a veces que sólo sirven para descargarnos y decir no – lo que SIEMPRE me parece mucho mejor que la total indiferencia-. Hay que hacer cosas efectivas. Tomar conciencia y ser más atrevidos ante nuestro temor o vergüenza. Seguimos viviendo al ritmo de nuestros padres, que ignoraban que los recursos como el aire o el agua un día se puedan acabar. Consumiendo, contaminando. Opacados por la fuerza del qué dirán.

Y yo misma, en primer lugar. Sentada aquí, muerta de limeñísimo roche, luchando contra mi propia estupidez y la colectiva, temiendo el qué dirán. Contenta de haber ido. Contenta de cuestionarme.

Sola hasta los putos huesos.

Solos los cinco teatreros locos que usualmente motivan a la gente en las marchas.

Solas las quinientas almas en el corazón de Miraflores.

Solo el llanto de las hembras y los niños.

Solo el estómago crujiendo, el frío.

Sola la rabia. Sola la pena.

Sola la esperanza, preñada de sí misma.

Todos los locos solos, desnudos ante sí mismos.

lunes, 8 de junio de 2009

Tù eres la selva, tus hijos, todo el mundo es responsable de la Selva, pulmòn del mundo-

Este miercoles 6 pm òvalo de Miraflores P
Protesta pacìfica por la paz en la selva y el respeto a los nativos y la naturaleza.

PASA LA VOZ XXX

La selva es el aire que respiras, no te olvides.

martes, 19 de mayo de 2009

Sara Hellen o la Guerra a la Autocompasiòn

Estamos a pocas semanas del estreno de nuestra performance Sara en el Icpna de miraflores. Sara, por Sara Hellen. Sara Hellen que es tambièn Marìa Magdalena, Eva, Lilith, Juana, y tantas otras.
El equipo y yo estuvimos de viaje por pisco este fin de semana, investigando y haciendo el debido pago para pedirle permiso a Sara de hacer este espectàculo inspirado en ella. Pasaron muchas cosas. Francamente en un momento nos entrò un poco de pànico. Por alguna razòn, ya en el auto, empezamos a preguntarnos ¿Y si Sara en realidad no era una chica libre y mìstica que querìa conocer el poder de las plantas curativas, sino que era un brujòn que se tragaba niños tiernos? En medio de esta disyuntiva, en medio de la noche prieta de la carretera al sur, un gato (rubio)vomitado de las profundidades de la tierra, cruzò la pista a una velocidad endemoniada y fue derecho a encontrar la muerte bajo nuestra llanta delantera izquierda. Bum. Gritos. Mierda, el gato. Carteles de retorno a Lima parecìan multiplicarse ante nustros ojos. Nuestro productor llama a su bruja personal. No nos da esperanzas. Le da muy mala espina. Silencio en el auto. Terror. ¿A dònde vamos? ¿Què estamos conjurando? ¿Està bien lo que hacemos? ¿Quièn es esta mujer que nos llama y nos hace hablar de ella, viajar a verla? ¿A quièn estamos representando? ¿Y si es un ser maldito? ¿Nos caerà a nosotros tambièn el peso de su miseria?
Pànico. Viaje largo hasta que llegamos a Chincha. En Chincha era santo de una vieja amiga de nuestro director G. , Maribel. Una morena bellìsima que baila como Dios. Què lindos en Chincha todos, que morenos. Què lindo el tiempo muerto como la tierra que pisas entre los algodonales. Què lindìsima la verdad de este pequeño pueblito a pesar de tanto turismo. Què ùnico. Què ciertas las estrellas que brillan sobre ellos. Allì se nos pasa un poco el susto a punta de Tutuma y vinito helado, Pisco, cervecita y menjunje de la abuela. Tres decentes nos vamos a dormir, dos se quedan tripeando.
A la mañana siguiente vamos a recoger a los triperos y dicen, Hay que recoger el celular de P. en el Guayabo, se le ha quedado allì. El Guayabo es un pequeño pueblito muy , pero muy particular. Mucho màs perdido en el tiempo que Chincha, mucho màs pequeño. Lo amè por anàrquico, las casas no tienen ninguna distribuciòn lògica y parece un poco la aldea de los pitufos o una suerte de jardìn-del-desierto-y-algarrobos-Zen.
Allì me encuentro con mi loco. Poque a mi los locos me quieren, me buscan, me encuentran, me hablan, me tocan y por lo general sonrìen o lloran conmigo y me bendicen. Esto me hace sentir muy especial. Tal vez sòlo sea que tengo gancho para los locos, pero no deja de asombrarme. Me pasan la voz en la calle, me saludan sonrientes desde los basurales. Sòlo una vez el Loco Achiote - que en paz descanse- me metiò un zopapo, pero esa es otra historia y puede ud. leerla aquì. Llegamos al Guayabo y yo manejaba la camioneta. Unos hombres beben sentados en la puerta de la casa donde se encuentra el telèfono de P. Son sòlo las diez de la mañanba, pero el sol azota. Entonces lo veo. Me ve. Viene. Le digo a la gente en el auto: Aquì viene. Parece sòlo un borracho alegre. No es un borracho. Es un pastrulo en tragos. No està alegre. Està muerto y rìe. Se acerca a mi ventana. Me provoca salir corriendo. Cerrar la luna. Irnos. Siento su ira. Es violento. Quiero irme. No se puede. Me quedo quieta. Y sonrìo, sonrìo siempre. De frente me pide besos. Uno en cada cachete. Esos se los doy contenta. Pero luego me habla. Me habla cosas que nadie entiende. Borbotea palabras. Despuès de un rato me fija los ojos y me pregunta muy claro, ¿Tù sabes quièn soy yo? Lo miro, trato de recordar. Estamos en Chincha y èste puede ser un mùsico famoso o un bailarìn caìdo en desgracia. Trato de reconocerlo con mi cerebro precario. Entrecierro los ojos. No recuerdo. Pero èl me mira muy fijo. Tù me conoces, me dice y me clava los ojos en la espina dorsal. Entonces lo reconozco. Claro que lo conozco. No es el moreno que està enfrente mìo quièn me habla. Es el demonio que lo posee. Es el lado oscuro de la noche. El demonio de la gula, del exceso, del alcohol y la droga. Quìen soy yo, me pregunta la voz grave desde el mulato. La cara deformada en una sonrisa espantosa. Lo miro adentro y lo recojo. Tù eres la luz, le digo. El mulato se rìe mientras evalùa reventarme. Me mira mucho, muy adentro. Me hace caras horribles quiere provocarme miedo. Yo no se lo repito, pero lo repito adentro: Tù eres la Luz. La Luz. El mulato de pronto se va. Se sienta bajo un àrbol. Se lleva una mano cansada a la cabeza. Parece triste, ausente.
*
Cuando nos vamos nos despedimos de èl al paso y èl nos hace un gesto extraño, algo asì como ya pasa pasa nomàs y ya nos veremos de nuevo. Tiemblo. Manejo la camioneta que no me pertenece. Me parece curioso que sea yo quien lleve al equipo (amigos mìos) literalmente a la tumba de Sara Ellen. Yo que me meo de miedo. Me parece lògico. Vamos hacia Pisco. En Pisco gracias a Dios nos damos con que efectivamente, Sara Ellen es adorada como beata. En su tumba dice, SH, beloved wife of J. Roberts. Asì que la han tomado de beata del amor. El cementerio antiguo està destruìdo por el terremoto. De las pilas de escombros escapan los ataùdes centenarios. Asoman encajes antigos, antiguos modelos de ataùd. La tumba de Sara està intacta. Bañada en flores rojas. Rodeada de placas de agradecimiento. Tal vez fue un brujòn. Pero aquì en su nueva casa, un fuerte manto de amor la protege incluso de sì misma.
*
Cuando regreso abro el blog y veo todos sus koments tras mi llamado de auxilio, estoy destruìda. Es que en verdad he estado muy agobiada y triste y no he tenido alma para escribir. Veo sus koments. Todos estàn allì, ayudàndome. Y siento una honesta verguenza. Què fàcil es tener gente a tu alrededor. Què fàcil que es llamar la atenciòn. Què fàcil y còmodo es ser el centro. Yo nunca hago esto. Lo hice sin darme cuenta. Es que aprecio mucho que lean este blog y no querìa tenerlos en el aire. Y lo que me pasaba era eso, concretamente. Me siento contenta sin embargo de haber sido honesta con Uds. En la vida no cybernètica nunca digo que estoy mal. ¿Còmo estàs? Bien. Bien. no importa cuàl sea la verdad. Yo estoy bien. Y sòlo a la gente que sè que me quiere le digo, Estoy hecha mierda. Estoy destruìda. No me gusta la autocompasiòn. Me da mal de estòmago. Es tan fàcil llorar y ser querida. Mostrarse fràgil y obtener amor. No es lo mìo. Pero supongo que, sin conocerlos, les he escrito como a gente querida. Con franqueza, sin màscaras.
Y agradezco mucho su presencia.
Este post es para ustedes. Si Kojudòpolis no tuviera Kojudopòlitans tal vez hubiera desaparecido hace tiempo.
Muchas gracias.
K.

jueves, 14 de mayo de 2009

Estoy destruìda

Y me falta alma para escribir.
Gracias por pasar.
Prometo mejorìa pronta.
Abrazos Kojudopòlitans.
K.

sábado, 2 de mayo de 2009

Got a Nana?

Bienvenidos al mundo de las Nanas. Las Nanas son un gran dolor de cabeza para mì. No sabrìa decir si no he tenido suerte con las nanas que tuve hasta ahora o si son ellas las que no han tenido suerte conmigo.
La primera nana se llamaba C. y me caìa bien. Era silenciosa y andina, joven. Nos llevàbamos bien. Con el que no se llevaba muy bien era con mi novio (que es màs exigente que yo, lo que es un cuadro superlativo). El problema entonces fue que ella no estaba contenta con su vida, y yo menos. Todo iba bien hasta que vinimos a Huachipa. Aquì yo le pedìa las mismas cosas que le pedìa en casa, pero acà trabaja un montòn de gente. Y misteriosamente mi dulce ama campoyana se convirtiò en uns señorita lisa, llena de bufidos. No duramos mucho asì. Un dìa me dijo que necesitaba vacaciones y yo no supe de què àrbol agarrarme para no morir de risa amarga. ¿Vacaciones? ¿A los ocho meses de trabajo? ¿Y a mì quièn me da vacaciones? No lo podìa creer. Pero estaba claro que esa era su manera de decirme que se iba. Y asì, se fue.
La segunda nana la tomè de una excelente agencia de empleos. Pero no querìa ser nana. Querìa estudiar corte y confecciòn. Tenìa 18 años, y todo el derecho a soñar. De pronto le pedìa que limpiara la casa, por favor, que està toda sucia, y se echaba a llorar. Comencè a sentirme como si fuera la bruja mala del cuento y eso comenzò a serme sùmamente incòmodo. ¿Por què tengo que sentirme asì? ¿Con tanta gente que quiere trabajar?
No durò mucho con nosotros y se fuè impecablemente, con su besito y todo, y nos trajo a una amiga de su prima, por que ellas eran de Huaral. La amiga de la prima se llamaba A.
A. de un nombre horrible. Le preguntè si le gustaba su nombre y me dijo que no , que lo odiaba. Ah, ¿no te gusta?. No, me lo puso mi papà para fregarme. Ah, ya... Si, por que cuando era màs joven, habìa tenido una novia que se llamaba asì , y por eso me puso ese nombre. Lo odio. Ajà. Lo primero que hicimos fue preguntarle si querìa que la llamàramos de otro modo y nos dijo A., como cierta actriz de telenovelas. Ok. A. De allì en adelante fue A.- como el personaje de las novelas. Era una chica un poco rara. Su contextura fìsica era clàsica de las mujeres que han sufrido algùn tipo de agresiòn sexual. Encorvada. Pecho hundido. Cola adentro. Pero hay tantas mujeres con esa contextura en el Perù. Un dìa, unos meses despuès de comenzar a trabajar con nosotros, mi novio le preguntò que de dònde sabìa hablar tan bien kechwa. Y allì comenzamos. Era de Ayacucho. Su familia vino huyendo. En su delante habìan matado a sus tìos y primos. Vinieron huyendo. De los militares. De los terrucos. De todos, como siempre. Y viene mi novio con los ojos abiertos y me dice Guau K. , dile a A. que te cuente su historia , es alucinante, es una sobreviviente. Y entonces le pregunto en el auto, camino a Huacondo. Y el camino es tan largo. Y asì ella me cuenta que su novio la acaba de dejar por otra màs joven (16). Y que ya tenìa un hijo con ella. Y que se sentìa vieja (21). (Pobre, la entiendo) Y que nunca habìa querido tener relaciones con èl. Porque le daba miedo amar y que la dejaran. Porque su padrastro habìa abusado de ella desde los seis. Y un tìo desde los nueve.
Silencio. Necesitamos terapia urgente. Esta dama cuida a mi hija. Se ve tranquila. No me gusta su sonrisa. Me perturba algo de ella. Serà mi propio miedo. No podemos cerrarle la puerta a alguien que ha sufrido tanto. Se queda.
Pasan los meses. Llora. Se vuelve sombrìa. Lunes negros. Por què estàs asì. Ayer lo vì, con la otra. Sombrìa. Ya nos vamos a mudar, le digo. A otro distrito, donde puedas conocer a alguien mejor. La plata no llega nunca. Ni la ocasiòn còsmica de mudarse. Los dìas pasan para A. Sombrìa. De todo te enojas. De todo lloras. Para tì soy otra vez la bruja. Dios mìo, tal vez soy yo. Sombrìas. Pasan los meses. Se va.
Le hago una carta de recomendaciòn y se va. Me llaman con frecuencia para preguntarme por ella. A veces me siento mal de no avisar. Me sentirìa tambièn pèsima de avisar. La angustiante historia de A.
A. se fue. Y yo volvì a la agencia. Me presentaron a una dama que sabìa hacer de todo, que habìa trabajado en familias de alcurnia y abolengo y que sin embargo estaba dispuesta a trabajar por lo que yo le pensaba pagar. Debì sospechar. Hablamos. Me miraba con la frente alta y la ceja arqueada. Me parece que un par de veces de arriba a abajo. En un cierto punto de la conversaciòn me pregunta, ¿Y mi uniforme? Y yo le digo, No se preocupe, en mi casa no se usa uniforme. ¡Ah, no!. ¿Sabe quê? Sin uniforme yo no trabajo, me dice, y se va para adentro. Ok. Mejor antes que luego.
Y asì llego a M. (se va el lunes). M. me pareciò amena, sonriente. Es madre de cuatro chicos hombres asì que perfecto, ideal. Al inicio era hacendosa. Lava muy bien. Poco a poco comenzò a pasar cada vez màs tiempo en la lavanderìa. Y mi hijita, que es un sol, a ponerse cada vez màs impositiva y gritona. Todo el mundo me decìa que la nana no era buena y me fui dando cuenta. Cuando encontraba a la bebe con kk de una hora, Ay pues, señora, es que la niña no se deja cambiar, llora. Cuando encuentro a mi hija caminando sola por allì, Ay sì pues, señora, es que la llamo y no viene. Llora. Cuando la encuentro jugando con el encendedor, Si, pues, no deja que se lo quiten, llora. Y entonces no sòlo es el inmenso peligro. Sino que la bebe ahora pide cualquier cosa llorando. Supra may. Surfea en la nana. Hace lo que le da la gana con ella. Puenting. Lo que sea. No te pases.
*
Asì que mi bebe tiene casi tres años y cuatro nanas.
*
Yo les pido que me enseñen, que me hablen. Yo nunca he tenido este tipo de relaciòn con nadie. Tampoco me gusta mucho eso de un extraño en todos tus momentos kodak. Por eso pido que me hablen, para mejorar. No ha funcionado hasta ahora.
*
*
*
Espero aprender pronto.

martes, 14 de abril de 2009

Pachamama, mamita.

Hoy que tengo que arrancarme un pedazo de corazòn y comèrmelo, siento tu cariño.
Brisita. Abrazo. Callejòn solo. Estrellitas. Helado. Rìo bravo. Mar mìo. Viento wayro. Sol dorado. Risa de niño. Agua.
Tanta soledad. Tantìsima presencia.
Pachamama mamita
Abrazo de adentro.

jueves, 2 de abril de 2009

La Noche Arabe en Arequipa

Serà este viernes y sàbado en el teatro del ICPNA de Arequipa, a las 7.00 pm.
Ya saben,
No vayan.
Abrazos,
K.
(Este fin de semana, Franzisca)

viernes, 27 de marzo de 2009

ECO-Apagòn!!!



No lo olviden!!!
Perù: 8.30 pm.

No lo olvidemos, porque las acciones son lo ùnico que cuenta.
Besos,
K.