Kojuqué?

Hace poco un Kojudopólitan preguntó qué era Kojudópolis para mí. Y me dejó pensando.

Kojudópolis es un blog. Un blog es un espacio virtual. Inexistente en el mundo de lo tangible. Donde uno y si quiere otros plasman sus opiniones. Se encuentran. Poemas. Fotos. Y otros elementos clasificables en bytes. Un byte, no es un mordisco. Se sospecha sea un pekeño kósmos.
Tranquilos. En pos de nuestra seguridad, ya estamos planeando su invasión y posterior conquista.

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Un día, si sobrevivimos a nuestra infinita estupidez y torpeza, el mundo, después de megaguerras, será uno solo. Será un sólo gran país. Habrá quienes deseen que este megapaís se llame Estados Unidos del Mundo, o tal vez Nuevo Imperio del Planeta Naciente. Tal vez se llame Al - Kombatenosfuimos. Y este industrializado megapaís de la megapostguerra tendrá una megacapital, probablemente llena de gente asustada. Estupidizada a conciencia. Egoísta al extremo por instincto de conservación y porque ya entonces la publicidad nos habrá convencido de que no hay nada que realmente merezca ser amado. Seremos, en suma, una megatira de Kojudos elementales, bien alimentados, bien vestidos, engañados. Kojudópolis.
Un poco como ahora.
Pero más tarde.
Y a la vez no.
Y a la vez haya quienes se opongan a éste dominio. E inevitablemente se mezclarán en un caldero todos los credos, todas las posturas en desacuerdo, los pacifistas y los que creen que haya que tomar la fuerza. Serán, lo quieran o no, una sola fuerza contraria. Unos vendrán de las kloakas. Otros sólo habrán dicho NO. Otros serán ángeles caídos. Otros caerán de arriba porque allá se está muy frío. Otros bajarán a curar a los rebeldes y ya no los dejarán subir. O ya no querrán subir más. Serán mezclados todos por las compañías consultoras. Por los publicistas gubernamentales. Por legisladores corruptos y lobbystas o lo que haya en esa época. Serán mezclados gracias a la gran ignorancia sembrada con paciencia durante siglos. Entre gente que ya considera tan sólo el hecho de preguntar, un delito. Serán mezclados y combatidos como talibanes, como terrucos, como ofensores al régimen. Serán los Kojudos, los que se quedaron fuera porque no quisieron creerse el cuento. Con lo fácil que era. Cerrar los ojos. Y mirar la tele. Flatron. Les van a querer dar duro. Por tercos. Por Kojudos.
Dirán entonces que ya estaban muertos. Que ya no les corría sangre por las venas. Y los llamárán casualties.
Y su ciudad, aunque escondida, será llamada de donde vienen los Kojudos, o Kojudópolis.

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Esos son algunos de sus orígenes, para mí. Y para Ud...
...
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